NIKOLAS ROSE
Rose
es uno de los referentes indispensables en el estudio de la historia social y
política de las ciencias humanas. Sobre el poder afirma que interviene en la
conformación y en la actualización de la libertad individual y lo hace en base
a su carácter relacional, es decir, el poder es una acción.
Rose
toma como contexto de análisis la sociedad neoliberal y como espacio de estudio
excepcional los saberes y practicas (psicología y psiquiatría). Estos saberes y
practicas han originado nuevas formas de autoridad (“autoridad terapéutica”)
que, legitimadas por el poder que le otorga el discurso científico y el
conocimiento positivo, se han constituido en principios que informan sobre cómo
conducirnos y gobernar nuestra vida.
¿Qué significa el término “poder”
cuando nos referimos a las psicoterapias?
En
los años 70 y 80, los críticos argumentaron sobre el psicoanálisis y las
psicoterapias, que las terapias en nuestras sociedades contemporáneas,
consideradas racistas, capitalistas y patriarcales; eran claramente un
instrumento de normalización y control.
Empero,
la visión del autor es muy distinta pues no considera que se pueda trazar una
clara línea de demarcación entre las teorías y las practicas terapéuticas. Sino
contemplar la realidad de las practicas terapéuticas actualmente existentes tal
y como funcionan, la cuestión sería como los conceptos, las teorías, las
explicaciones de las diferentes escuelas terapéuticas hacen posible estas prácticas
y como operan en su interior.
A
continuación, algunos tipos de ejercicio de un poder manifiesto en las
psicoterapias:
1.
La psicoterapia es
una relación clientelar. Significando “cliente” a alguien que está bajo la protección
y el patronazgo de otro, es decir, alguien que es dependiente. Para realizar
esta actividad llamada terapéutica una persona tiene que desplazarse al lugar
en el que trabaja la otra, que es la que controla el tiempo, la frecuencia, el
lugar físico y la disposición de la sala en que transcurre la actividad terapéutica.
Todos estos aspectos dan lugar a ciertos vectores de poder.
2.
El dinero esta
generalmente mediando la relación. En la terapia la tutela conforma y
sobredetermina el contrato.
3.
La terapia implica
un tipo de poder que puede ser denominado sacerdotal. Una persona tiene la
capacidad de reestructurar los significados a través de los cuales la otra
confiere sentido a su vida y a sus acciones.
Por
otro lado se considera el concepto de la Ética, que tiene que ver con las vías a
través de las cuales los seres humanos conducen sus vidas, las vías a través de
las cuales adoptan decisiones acerca de cómo deben vivir, que deben evitar y porque
tienen que luchar.
¿Expertos en el arte de vivir?
Con
el nacimiento de los conocimientos psicológicos y de las técnicas y teorías terapéuticas
durante el transcurso del siglo XX hay una cierta sensación de que la ciencia
ha intentado responder a la cuestión de Tolstoi: ¿Qué debemos hacer y cómo
debemos vivir?
Las
terapias se han apropiado, quizás de forma poco sincera, del dispositivo de
conocimiento positivo, lo que incluye revistas, seminarios, investigación, etc.,
junto con todo un conjunto de dispositivos de formación así como de credenciales
impartidas por los terapeutas.
Así
pues, la demanda de terapias, al menos en este sentido, se basa en que es
posible un conocimiento experto, es posible una técnica propia de expertos a
quienes se les puede plantear la cuestión ética fundamental de quiénes somos y de
cómo podemos vivir, o al menos de cómo podemos proveerlos de espacio y de
instrumentos a través de los cuales se puedan formular estas cuestiones.
Condiciones
EL
nacimiento de la autoridad terapéutica estuvo relacionado con determinadas
transformaciones significativas en el desarrollo de la vida y en la forma en la
que los seres humanos se pensaron a sí mismos en el siglo XX. En la medida en
que estas condiciones sigan transformándose todavía más es probable que las
terapias puedan perder su significación cultural y ética.
Las
terapias han ocupado el lugar de la religión. La visita al terapeuta ha ocupado
el lugar de la confesión y el terapeuta ha asumido el papel de sacerdote.
Las
psicoterapias, al igual que el conocimiento psicológico, han surgido con la transformación
de lo que se supone que los seres humanos tienen que llegar a ser. Esta idea acerca de cómo se debe ser induce a
considerar que se es un ser más completo cuando se es hábil para elegir, para
realizar una narrativa propia. Dando paso a lo que cada uno tiene que asumir su
responsabilidad acerca de la felicidad o la infelicidad de su propia
existencia.
El
nacimiento de las psicoterapias, en tanto de técnicas de guía espiritual, está íntimamente
ligado con esta visión de que el yo debe constituirse en sujeto de elección en
su vida cotidiana con el fin de hacer realidad sus potencialidades y
convertirse en lo que realmente es.
Atando cabos
Las palabras de la terapia
El nacimiento de los lenguajes psicológicos para describir a las personas y a su
conducta hace surgir determinados tipos de yo significativos y que nos obligan
a hablar acerca de nosotros mismos en términos
particulares con el fin de evaluarnos en relación con determinadas normas y
narrar nuestra experiencia a otros y a nosotros mismos mediante un lenguaje psicológico:
“traumas”, “carencias emocionales”, etc.; indispensables dadas las vías a través
de las cuales se llega a la propia reflexión.
*El
lenguaje es importante en lo que se refiere al asunto del poder y de la
influencia de las psicoterapias.
Éticas
Reflexiones
sobre las éticas, en la compresión de las psicoterapias:
I. Escenarios éticos;
la vía a través de la cual un amplio conjunto de problemas espaciales han sido
transformados mediante la aplicación de conocimientos terapéuticos en
soluciones terapéuticas. Donde se encuentra: La subjetivizacion del trabajo, la
psicologizacion de la vida cotidiana.
II. Ética material;
aquellos aspectos del yo, dotados de una significación ética, que son
evaluados, problematizados y sobre los cuales se ha de trabajar.
Los
lenguajes psicoterapéuticos y psicodinamicos que solían ser dominantes han sido
desplazados, su consecuencia es la preeminencia que han adquirido formas de análisis
que conciernen mucho más directamente a la conducta de los individuos. Estas
terapias de conducta y cognitivas abordan la conducta de los individuos como
algo problemático que debe ser reformado.
III. Las
técnicas éticas; las cuales no proveen a la gente simplemente un modo de
entender sus malestares, sino también para proporcionarles determinadas técnicas
para actuar sobre ellos mismos con el fin de rehacerse. Tales como: Técnicas de
compromiso, expresión, evaluación y reforma del yo.
Etnografías
Método de estudio utilizado por los
antropólogos para describir las costumbres y tradiciones de un grupo humano.
Una
característica propia de las situaciones terapéuticas es el modo de hacer que
algo sea visible, audible y por lo tanto, susceptible de ser descrito, lo que representaría
una de las vías en las que éstas constatan sus efectos.
Por
lo que si se contase con detalladas etnografías acerca de lo que sucede en las
situaciones terapéuticas, se podría observar el modo en el que a través de un
complejo y sutil camino de labor conjunta del terapeuta y del paciente modula
los problemas de acuerdo con ciertas gramáticas, repertorios y marcos.
VOCABULARIO
Aglutinar: Unir, pegar una cosa con otra.
Disección: Análisis pormenorizado.
Coerción: Represión, sujeción.
Imbricada: Superpuesta parcialmente a otra del mismo tipo.
Postfacio: Como un prologo, impone continuar la reflexión estimulada
por la lectura de la obra.
COMENTARIO
Un
texto que expresa la reflexión del autor, sobre las psicoterapias presentando
en primera instancia un enfoque sobre el “poder terapéutico” y las maneras como
se han dado en el tiempo; asimismo manifestando la relación clientelar, lo
lucrativo, y su analogía con el sacerdocio de éstas. Por otro lado expresa como
las terapias se han apropiado de un conocimiento positivo basándose en que es
posible un conocimiento de experto, lo que a mi parecer quebrantaría el hecho
de mantener una relación horizontal con la persona que acude. Finalmente se menciona
los lenguajes psicológicos, para la descripción de las conductas de las
personas y como éstas de cierta manera permiten una reflexión de nosotros
mismos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario